La Academia del Perfume es una fundación cultural sin ánimo de lucro con la misión de la divulgación e impulso del mundo el perfume,
con énfasis en su faceta de creación artística y cultural. Inspirada en las Reales Academias, cuenta en su seno con los “Académicos del Perfume”,
un grupo de élite en el que se encuentras los mejores perfumistas de habla hispana del mundo.
Se expresa a través de diferentes actividades: desde proyectos culturales como la exposición olfativa en el Museo del Prado o la creación del
perfume Silver Kiss para la película Rainbow de Paco León a think tanks
y mesas redondas, webinars y
píldoras de Académicos, visitas al terreno,
talleres y experiencias olfativas y formativas, semanas temáticas, así como actividad informativa continua a través de sus redes sociales.
Su página web es una completa fuente de información sobre el perfume, en la que se reúnen desde entrevistas y noticias de actualidad a la riqueza
de la historia del perfume, familias olfativas, biblioteca del perfume y otras curiosidades.
En resumen, una “factoría de contenidos” en torno a la cultura del perfume.
Los “Premios Academia del Perfume” son ya conocidos como los “Óscars del Perfume”, se trata de los premios anuales a los Mejores Perfumes del Año,
que en 2023 celebran su decimosexta edición. Estos premios buscan acercar el perfume a la sociedad a través de la gran variedad de perfumes existentes
para todos los públicos, de los más cercanos y asequibles, como la categoría Lifestyle, a los más exclusivos, como la categoría Nicho.
Este año, con el interés creciente de perfumar los espacios que nos rodean, se ha creado la categoría “Perfume de hogar” con velas y mikados.
Toda la información de las categorías y premiados se puede ver en la sección “Los ganadores”.
La estatuilla, símbolo de los Premios
El diseño de estatuilla de los Premios Academia del Perfume data de 2019. La Academia quería crear un símbolo que recreara su esencia en una pieza 3D que capturara la icónica “flor” de su anagrama.
Esta flor simboliza a su vez la creación artística del perfume: partiendo de una idea o nota olfativa lineal, avanza en un camino en el que se va entrelazando en acordes más complejos. Esa forma etérea e intangible sigue su enrevesado recorrido hasta llegar a la forma final donde se desvela sorprendentemente y cobra todo su sentido: ese aparente garabato adopta la vaporosa silueta de una bella flor. La flor del emblema de la Academia queda arropada y protegida por un marco que simboliza una urna amarilla, cual frasco que contiene las esencias del perfume, que la enmarca, protege y destaca.
La Academia del Perfume recurrió en 2019 al artista plástico y Doctor en Bellas Artes Daniel Silvo y le dio libertad creativa para desarrollar la estatuilla, con la única premisa de mantener el espíritu de la flor y de la urna que la sostiene. Silvo la interpretó en una pequeña escultura de piedra y metal. Como base, utilizó la nobleza de una negra piedra de gran peso, en forma de L, como si un sujetalibros se tratara. Sobre ella florece, modelada en alambre dorado, vestida de gala, la silueta de la icónica flor.
Visita la sección “las estatuillas y galardones” para saber más
La estatuilla, símbolo de los Premios
El diseño de estatuilla de los Premios Academia del Perfume data de 2019. La Academia quería crear un símbolo que recreara su esencia en una pieza 3D que capturara la icónica “flor” de su anagrama.
Esta flor simboliza a su vez la creación artística del perfume: partiendo de una idea o nota olfativa lineal, avanza en un camino en el que se va entrelazando en acordes más complejos. Esa forma etérea e intangible sigue su enrevesado recorrido hasta llegar a la forma final donde se desvela sorprendentemente y cobra todo su sentido: ese aparente garabato adopta la vaporosa silueta de una bella flor. La flor del emblema de la Academia queda arropada y protegida por un marco que simboliza una urna amarilla, cual frasco que contiene las esencias del perfume, que la enmarca, protege y destaca.
La Academia del Perfume recurrió en 2019 al artista plástico y Doctor en Bellas Artes Daniel Silvo y le dio libertad creativa para desarrollar la estatuilla, con la única premisa de mantener el espíritu de la flor y de la urna que la sostiene. Silvo la interpretó en una pequeña escultura de piedra y metal. Como base, utilizó la nobleza de una negra piedra de gran peso, en forma de L, como si un sujetalibros se tratara. Sobre ella florece, modelada en alambre dorado, vestida de gala, la silueta de la icónica flor.
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